Las chinches de cama son insectos pequeños sin alas que suelen alimentarse de sangre humana durante la noche. Estos insectos nocturnos se esconden en las costuras de los colchones, en sus bases o en hendiduras y grietas cercanas a la cama, en la estructura de la cama (el cabezal, el canapé, el somier y los pies) y el mobiliario cercano a la cama (las mesillas de noche y las butacas y sillas).
La picadura de la chinche causa edema y enrojecimiento de la zona afectada, con picor más o menos intenso. Esta reacción alérgica es debida al anticoagulante contenido en la saliva del insecto.
Estos insectos tienen la capacidad a desarrollar resistencias a biocidas, se ha demostrado que son uno de los insectos que presentan mayor número de resistencias, lo que dificulta su control y erradicación.
El mal uso de insecticidas puede ocasionar el efecto contrario y dispersar la plaga a zonas libres de este insecto, es por ello, que existen diversos métodos más seguros para la salud, más respetuosos con el medio ambiente y con una mayor eficacia para el control de esta plaga.
Nombre científico: Cimex lectularius
Apariencia: insectos en forma ovalada, de color castaño marrón y planos desde el tope al final. Los chinches adultos miden alrededor de un ¼ de pulgada de largo.
Hábitat: Los chinches de cama están activos solamente durante la noche, usualmente antes del amanecer. Durante el día, se esconden en las grietas y las ranuras de las paredes, el piso, la cama y muebles. Cuando hay pocas chinches de cama presentes, viven cerca del área donde duermen los humanos; cuando son numerosas, pueden ser encontradas en cualquiera de las habitaciones de la casa.
Dieta: Se alimentan de sangre de los humanos. Los adultos se alimentan en promedio una vez por semana, pero se alimentan muchas veces durante sus cuatro meses o más durante su ciclo de vida.
Reproducción: después de que la hembra se aparea deposita sus huevos en sus lugares de descanso. Una hembra puede producir alrededor de 345 huevos durante su periodo de vida