Pulgas

Existen alrededor de 2000 especies diferentes de pulgas. Ctenocephalides felis es la más común tanto en gatos como en el 90% de los perros.
Las pulgas de los adultos son parásitos (se alimentan de sangre) de mamíferos y aves.

Tipos de pulgas

Pulga de gato

Apariencia:  Las pulgas de gato son insectos de aproximadamente 1 a 3 milímetros de longitud, de color marrón rojizo a negro. Tienen una cabeza pequeña, antenas cortas y largas patas traseras diseñadas para saltar grandes distancias.

Hábitat: viven entre el pelaje del gato, prefiriendo áreas cálidas y húmedas del cuerpo como el lomo, el abdomen, el cuello y la base de la cola

Dieta: Las pulgas de gato son parásitos externos que se alimentan de la sangre de mamíferos, principalmente de gatos, aunque también pueden picar a otros animales y humanos.

Reproducción:  Las hembras pueden poner entre 20 y 50 huevos al día. Estos huevos caen del pelaje del anfitrión y se desarrollan en el entorno, como alfombras, camas y suelos. Las larvas emergen de los huevos y pasan por tres estadios larvales antes de transformarse en pupas. Las pupas pueden permanecer en estado latente durante semanas o meses, esperando condiciones óptimas para emerger como pulgas adultas, listas para infestar un nuevo huésped.

Pulga de perro

Apariencia:  aproximadamente miden 1.5 a 3.2 milímetros de longitud, de color marrón rojizo a negro. Tienen una cabeza pequeña, antenas cortas y largas patas traseras adaptadas para saltar grandes distancias.

Hábitat: viven entre el pelaje del perro, prefiriendo áreas cálidas y húmedas como la base de la cola, el lomo-dorso y el abdomen

Dieta: Las pulgas son parásitos externos que se alimentan exclusivamente de la sangre de mamíferos, principalmente de sus anfitriones, como los perros.

Reproducción:  Las hembras pueden poner entre 20 y 50 huevos al día. Estos huevos caen del pelaje del animal y se desarrollan en el ambiente. Las larvas nacen de los huevos y pasan por tres estadios larvales antes de transformarse en pupas. Las pupas pueden permanecer en estado latente hasta que las condiciones ambientales sean favorables, momento en el cual emergen como pulgas adultas listas para infestar un nuevo anfitrión.

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